Los estudiantes: - Reconocen las emociones y la forma en la que se manifiestan en ellos a través de actividades didácticas, considerando sus propios intereses y los de sus compañeros y compañeras - Integran comportamientos y conocimientos que contribuyen a un buen manejo de su gestión emocional, a través de diversas actividades divergentes que les permiten reflexionar respecto a sus conductas, considerando sus emociones en el proceso. - Practican hábitos y actitudes que contribuyen a un manejo adecuado de las emociones, a través de diversos ejercicios autónomos y colaborativos, que les permiten reflexionar sobre sus comportamientos, reforzando su pensamiento crítico y autoconocimiento. - Reconocen el significado de empatía y sus distintas manifestaciones, por medio de distinto ejercicios que les permiten identificar y diferenciar las conductas de esta índole, considerando un uso correcto de comunicación y valoración del proceso. - Emplean estrategias colaborativas y personales que les permiten desarrollar relaciones más empáticas, considerando sus emociones y la de los demás.Reconocen las etapas que permiten resolver conflictos de forma adecuada, teniendo en cuenta las emociones de ellos mismos y los demás. Los educadores: - Emplean y reconocen estrategias neuropedagógicas para sus sesiones, con el objetivo de integrar instancias novedosas que permitan llegar a los diferentes estilos de aprendizajes de los estudiantes - Integran comportamientos y conocimientos que contribuyen a un buen manejo de su gestión emocional, a través de diversas actividades divergentes que les permiten reflexionar respecto a sus conductas, considerando sus emociones en el proceso. - Reconocen el significado de empatía y sus distintas manifestaciones, por medio de distinto ejercicios que les permiten identificar y diferenciar las conductas de esta índole, considerando un uso correcto de comunicación y valoración del proceso.